sábado, 16 de mayo de 2015

Huracán.

Escribir es lo que me vacía por dentro, lo que me alivia, lo que hace que no duela tanto. Es lo que me hace pensar si hago bien o mal, lo que me hace sentir libre... O al menos hasta que también recorten los derechos, como la libertad de expresión. 
Te echaré de menos, echaré de menos que me vengas a saludar a la puerta, o cuando te cuento cosas, sabiendo perfectamente que no me entiendes pero aún así sintiéndome consolada. Echaré de menos esa carita de buena que tienes, echaré de menos tu cama al lado del mueble del comedor, tu recipiente del agua y de la comida. Echaré de menos incluso algunos días pasear contigo a las siete de la mañana... Es increíble lo importante que te has vuelto para nosotras, has pasado a ser una más, una inolvidable. 
Y es una acumulación de cosas, un huracán formado en mi cabeza, en la complejidad de mis pensamientos, en la forma en la que me cuesta todo, en las pocas ganas que tengo. Y es triste, triste porque estaba en el punto clave, en el auge de mi adolescencia, con él, con mis amigas, con mi familia, con mis planes de futuro. Y no es que todo eso no siga ahí, claro que sigue, pero en este instante no lo puedo apreciar, me ciega el sol que anuncia el verano, que se acerca el momento de ir a la playa, pero de ir sin ti, no como habíamos planeado. 
Ahora me entra miedo de perder más cosas, de perderlas por ser como soy. 
No quiero perder a quien me hace feliz, a quien me hace seguir adelante, a quien me ayuda a superar los obstáculos de mi camino, de mi camino en el que quiero que me acompañe. Es lo mejor que me ha pasado, no creo que me pase algo igual nunca, nadie es como el, nadie le llega ni a la suela de los zapatos, y a veces me pregunto si yo lo hago. A veces mis amigas me cuentan las cosas malas de sus parejas, el porqué de sus discusiones, y yo pienso en nosotros, en que somos totalmente distintos a los demás... 
Cuando empezó el año pensé que iba a ser un gran año, y lo esta siendo, con sus más y sus menos pero lo esta siendo. Un tanto intenso diría yo. 


Un huracán arrasa con todo, pero conmigo no.